Se define como cualquier sonido no deseado o molesto que se produce en el lugar de trabajo y que puede tener un impacto negativo en la salud y el bienestar de los trabajadores.
Se considera un contaminante ambiental y un riesgo laboral importante, este se mide en decibelios (dB) una unidad que representa la intensidad del sonido. La exposición prolongada a niveles de ruido superiores a 85 dB puede causar daños auditivos permanentes.
Efectos del ruido laboral en la salud:
- Pérdida auditiva: La consecuencia más común del ruido laboral es la pérdida auditiva inducida por ruido (PAIN), la cual puede ser temporal o permanente. La PAIN puede afectar la capacidad para comunicarse y comprender el habla, especialmente en entornos ruidosos
- Tinnitus: El tinnitus es un zumbido o ruido constante en los oídos que puede ser causado por la exposición prolongada al ruido. Esta condición puede ser muy molesta y difícil de tratar, incluso con medicamentos o terapia
- Trastornos del sueño: El ruido laboral puede provocar fatiga, somnolencia durante el día y dificultad para concentrarse. La falta de sueño puede afectar negativamente el estado de ánimo, la productividad y la salud en general
- Estrés: El ruido puede aumentar los niveles de estrés, lo que puede conducir a una serie de problemas de salud, como la ansiedad, la depresión, la hipertensión y las enfermedades cardíacas
- Problemas cardiovasculares: Algunos estudios sugieren que la exposición prolongada al ruido puede aumentar el riesgo de sufrir enfermedades como, la hipertensión arterial, la enfermedad coronaria y los accidentes cerebrovasculares
Efectos psicológicos:
- Dificultad para concentrarse: El ruido puede interferir con la capacidad para concentrarse, lo que puede afectar negativamente el rendimiento laboral
- Irritabilidad y agresividad: El ruido puede aumentar la irritabilidad, la agresividad y la hostilidad, lo que puede afectar negativamente las relaciones interpersonales en el trabajo
- Ansiedad y depresión: El ruido puede empeorar los síntomas de ansiedad y depresión, y puede incluso desencadenar estos trastornos en personas predispuestas
Un obrero que trabaja en el sector de la construcción es probable que se vea sometido al ruido laboral durante gran parte de la jornada, debido al tipo de máquinas que se emplean en esta actividad. Para minimizar los efectos del ruido laboral, es importante que utilice tapones en los oídos y que su empleador busque mecanismos para reducir la contaminación auditiva (comprando los equipos más silenciosos, por ejemplo).
Para las mujeres embarazadas existe un inconveniente más: el feto también puede verse perjudicado por la exposición constante a altos niveles de ruido laboral, ya que la presión sanguínea aumenta a niveles anómalos. Según diversos estudios, soportar estas condiciones durante el embarazo acarrea un cansancio mayor y el riesgo de sufrir daños en el oído a causa de las bajas frecuencias. Es inevitable tomar medidas especiales para estos casos, en los cuales la mera protección de los oídos de la madre no resuelve el problema.
Medidas preventivas:
- Evaluación de los niveles de ruido: Se deben realizar evaluaciones periódicas de los niveles de ruido en el lugar de trabajo para identificar las áreas de mayor riesgo
- Control del ruido en la fuente: como utilizar maquinaria más silenciosa, instalar barreras acústicas y realizar los trabajos ruidosos en horarios no laborables
- Protección auditiva: Los trabajadores que estén expuestos a niveles de ruido peligrosos deben usar protección auditiva adecuada, como tapones para los oídos o auriculares con cancelación de ruido
- Capacitación y sensibilización: Es importante capacitar a los trabajadores sobre los riesgos del ruido laboral y las medidas que pueden tomar para protegerse
Cumplimiento de las normas legales: Las empresas deben cumplir con las normas legales sobre ruido laboral establecidas en cada país
En Venezuela, la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (LOPCYMAT) establece que los niveles de ruido en el lugar de trabajo no deben exceder los 85 dB durante una jornada laboral de 8 horas.